La visita que el escritor Fernando Lalana realizó a nuestro centro el pasado 23 de marzo, fue de lo más agradable. En lugar de hablarnos, como suele ser habitual en este tipo de eventos, en el Salón de Actos del Instituto, decidió recorrer las aulas cuyos alumnos habían realizado la lectura de uno de sus libros, La tuneladora, para que así el encuentro resultara más familiar y cercano.
En nuestra clase, el grupo C de 3º de ESO, tras hablarnos de su trayectoria en el campo de la novela juvenil, sus multiples ediciones, premios, sobre el libro que nosotros habíamos leído, y sobre otros de sus éxitos como, por ejemplo, El asunto Galindo o El círculo hermético, dio paso a una ronda de preguntas, en la que los alumnos lectores le pusimos en algún que otro “aprieto”, y le hicimos ver que estabámos muy enterados del libro que habíamos leído,de manera para algunos casi “obligada”, y para otros no, y de otras obras suyas que habíamos degustado por nuestra cuenta.
Algunos compañeros afirmaron que se habían “enganchado” a las aventuras del detective Fermín Escartín y de sus multiples casos, ya fueran robo, secuestro u homicidio. Fernando Lalana desveló que pronto “jubilaria” al detective que tanto le había acompañado a lo largo de su carrera, ya que llevaba con él demasiado tiempo.
Al finalizar una animada ronda de preguntas entre las que no pudieron faltar: “¿Existe Ciudad Jardín?” o, “¿Qué es el gas purpura?”, Fernado Lalana se dedicó a firmar los libros de quienes los habían traído, dejando así una huella de su paso por Tordesillas y por la afición literaria de sus jóvenes lectores.
Para terminar, se despidió, y los alumnos le agradecimos su estancia con un emotivo aplauso.
Crónica de Ismael Alonso Alonso (3º ESO – C)
